El Santuario de Tices en Ohanes, rodeado de ruinas y casas blancas en la sierra alpujarreña, se destaca en el mapa gracias a su historia única.
Construido en 1800 sobre las ruinas del antiguo templo de San Marcos, el santuario alberga la imagen de la Virgen de la Consolación, cuya presencia divina se atribuye a un evento sorprendente. La talla de la Virgen, llevada por soldados de Beires en una mochila, fue dejada en el suelo para descansar y nunca pudo ser levantada de nuevo. En su interior, una impresionante imagen de la Santa domina un altar de mármol, construido con el mineral de canteras cercanas que se agotaron al finalizar la construcción, considerado un acto divino que impidió replicar la obra.
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