La parroquia Nuestra Señora del Rosario, datada en el siglo XVII, es de estilo mudéjar y está dedicada al patrón del pueblo, San Roque. Reconstruida en 1950 debido a daños durante la Guerra Civil, conserva el artesonado original del techo y la pila bautismal. Las imágenes actuales reemplazaron a las antiguas, destruidas en el conflicto, junto con los archivos históricos de la iglesia.
La parroquia Nuestra Señora del Rosario, que data del siglo XVII y presenta un estilo arquitectónico mudéjar, es un importante lugar de culto dedicado a San Roque en el municipio. Reconstruida en 1950 debido a los daños sufridos durante la Guerra Civil Española, conserva elementos originales como el artesonado del techo y la pila bautismal.
Durante la Guerra Civil, la iglesia sufrió pérdidas significativas, incluyendo las imágenes religiosas y los archivos históricos que se guardaban en ella, los cuales fueron destruidos por el fuego. Tras la reconstrucción, se renovó el artesonado mudéjar del techo, que había sido dañado por una plaga de termitas. En este proceso, algunas vigas fueron reemplazadas y otras acortadas, lo que afectó al espacio interior de la iglesia.
Uno de los aspectos más destacados de la parroquia es el presbiterio, decorado con frescos inspirados en el estilo románico catalán, obra del sacerdote Bartolomé Marín Fernández. Estos frescos añaden un elemento de belleza y espiritualidad al interior de la iglesia, destacando su importancia como lugar de adoración y cultura en la comunidad local.