La Iglesia Parroquial de Santa María en Senés, construida en el siglo XV, ha vivido una rica historia de transformación.
Inicialmente una mezquita, fue convertida en templo cristiano bajo el reinado de Fernando el Católico. Tras el bautismo general de los moros en 1502, todas las mezquitas se convirtieron en parroquias. El Obispado de Almería se creó en 1492, y la iglesia de Santa María fue dotada de beneficios bajo el mandato de fray Diego de Deza en 1505. En 1570, durante revueltas, la iglesia volvió a ser mezquita, pero posteriormente fue reconstruida. Durante el conflicto con los moriscos, la mezquita fue incendiada. A lo largo de los siglos, la iglesia experimentó restauraciones, la última destacada en 1873 y otra en 1950 bajo la dirección del párroco Don Fernando Gómez Lara. A pesar de los desafíos, la Iglesia Parroquial de Santa María en Senés ha resistido y continúa siendo un testimonio histórico en la región.