El Castillo de Oria, una antigua fortaleza musulmana en ruinas, se alza majestuosamente sobre un cerro frente a la villa de Oria. Presenta una planta rectangular y está rodeado por una muralla adaptada al terreno. Actualmente, solo quedan los cimientos de las viviendas en su interior, pero su imponente presencia aún domina el paisaje.
El Castillo de Oria es un vestigio histórico que evoca tiempos pasados de dominio musulmán en la región. Aunque la información sobre su historia es escasa, su ubicación estratégica en lo alto de un cerro frente a la población de Oria indica su importancia como fortaleza defensiva.
Originalmente construido por los musulmanes, el castillo presenta una planta rectangular y una muralla que se adapta al terreno mediante el uso de tapial y mampostería. Tres cubos defendían una puerta en recodo, mientras que otros lienzos de muralla adoptaban la forma característica de muro cremallera para una mayor protección.
Hoy en día, el castillo se encuentra en ruinas, con solo los cimientos de las antiguas viviendas de la población aún visibles en su interior. A pesar de su estado deteriorado, el lugar ha sido declarado Monumento de Interés Cultural y está bajo la protección de las leyes españolas que salvaguardan el patrimonio histórico.
En un esfuerzo por promover el turismo en la zona, en el año 2008 se realizaron obras para iluminar el castillo y facilitar el acceso a través de nuevos caminos. Aunque no se pudo llevar a cabo un proyecto completo de restauración debido al avanzado estado de deterioro de la estructura, el Castillo de Oria sigue siendo un punto de interés para los visitantes que desean explorar su fascinante historia y disfrutar de las impresionantes vistas que ofrece desde lo alto del cerro.