El majestuoso santuario, construido en el siglo XVI, emerge como una novia elegante con su campanario adornado, destacando en el paisaje junto a los santuarios de Fuente Victoria y Benecid. Esta iglesia, representativa del arte mudéjar, presenta una estructura cuadrada con cuatro cuerpos y un chapitel goyesco que duplica la altura del templo. Su interior alberga pinturas celestiales y los vestigios de un antiguo órgano, evocando la atmósfera nupcial con la famosa marcha. Sin embargo, la Virgen de los Dolores, en el retablo mayor, refleja la tristeza por la pérdida de su patrimonio histórico-artístico durante la Guerra Civil.
El santuario, construido en el siglo XVI, destaca con su torre majestuosa y detalles goyescos. Representando el arte mudéjar, la iglesia alberga un antiguo órgano y pinturas celestiales, evocando la solemnidad nupcial. La Virgen de los Dolores en el retablo mayor refleja la tristeza por la pérdida durante la Guerra Civil, siendo testigo de la destrucción del patrimonio histórico-artístico.